Cumbre

Luego de la desastrosa invasión de Iraq y el asunto de las torturas en Abu Ghraib, el gobierno de los EEUU destinó un importante monto de dólares para incentivar y levantar la imagen de los Estados Unidos. Y eso como se hace?. La cobertura de la cumbre de presidentes en Córdoba ha puesto de manifiesto algunos comportamientos interesantes, algunos énfasis que desafinan. Algunos movileros parecían haberse convertido en agentes provocadores. Aunque no estoy seguro si algunos realmente no lo son. Algunos extranjeros ofrecieron dudas al respecto. El caribeño demostró demasiados trucos juntos como para no serlo. Sí, ese que luego, como no iba a ser así?, apareció en el programa “del profesor eshe que siempre habla de lo grecios de la antigua roma”, como dice un amigo cartonero. En estos días tiene que haber venido una remesa interesante, porque los muchachos están insoportables. El asunto de la neuróloga Hilda Molina, por ejemplo. Parece que esta señora fue un cuadro importante en el gobierno cubano. Luego, no se sabe porqué, se fue al carajo. Cosas de la edad, seguro. Quiere irse de Cuba y conocer a los nietos que están aquí. El nene tiene miedo de ir allá, teme que no lo dejen volver. La señora seguramente sabe algunas cosas que el gobierno cubano no quiere que se divulgen. Cuestiones de Estado. Por ahí, sabe de la superbomba biológica de Castro. Los cubanos han avanzado mucho en biología. Y esto me hace acordar a otro caso de un tipo que sabe mucho también de superbombas y tampoco lo dejan salir de su país. No recuerdo que los periodistas de aquí lo hayan mencionado nunca. Se llama Vanunu y no era un cuadro político sino técnico. Trabajaba en Dimona, el lugar donde Israel fabrica las bombas nucleares y termonucleares, con la ayuda inicial de Francia e Inglaterra, despechadas por la nacionalización del canal en1956. Bueno, este tipo también un día se piró, se rajó de Israel y le contó al Sundays News todo lo que sabía del desarrollo nuclear israelí. Un buen día, conoció en Gran Bretaña a un minón impresionante. La llevó a Italia, de paseo, y allí el minón lo empaquetó directo a Tel Aviv, como aquí hicieron con el pobre Eichman, que solo cumplía órdenes. Alli le dieron 18 años de prisión, en solitario, para que no ande contando cosas. Cuando salió, le prohibieron salir del país, hablar con periodistas, acercarse a un cybercafé, y cosas por el estilo. Vanunu estuvo nominado varias veces al Nóbel de la paz. Siempre he pensado que si no fuera por los topos, espías y tipos que se van de boca, el mundo sería mucho peor de lo que es.